Me equilibra el andar y la presión sanguínea
No se cómo contarlo para que me crean, pero yo no puedo caminar normalmente sin el Polarix. Si no lo llevo, me tambaleo al caminar como si estuviera borracha, por eso debo caminar muy lentamente. Sin el Polarix también tengo presión muy inestable, en cambio usándolo lo mantengo en límites normales. Podría decir que hasta influye en mi bienestar psíquico.
El primero se me rompió en donde está el agujerito para el cordel, así que tuve que pedir uno nuevo. Nunca me lo saco, ni siquiera al dormir. Recomiendo calurosamente usar el Polarix.
Lila E.